Ilargi, Pablo y Miguel Ángel se citan en Madrid de aquí a un par de meses
WiPT Bilbao

Si en Benidorm poníamos el acento en lo rápido que se decidió la mesa final, todo lo contrario ha ocurrido en esta etapa de Bilbao del Winamax Poker Tour en la que han tenido que tocar las 2:00 h de la madrugada para que quedara vista para sentencia. Todo invitaba a pensar que sería todo lo contrario, al fin y al cabo esta vez buscábamos tres nombres de ganadores en lugar de los dos de la semana pasada, sin embargo los acontecimientos ocurrieron de forma muy distinta hasta que las altas ciegas empezaron a dictar sentencia.

Sí es cierto que nada más empezar, se produjo el primer all-in y call con Jonathan y Marcos como implicados. Un cooler en toda regla de JJ contra 1010. Las jotas aguantaron y así llegó el primero de los muchos "double-ups" que se vivieron en la fase inicial de la mesa final. Tanto fue así, que se agotó una hora de reloj hasta que llegó la primera eliminación, o mejor dicho, las primeras dos, pues Miguel Ángel se cargó a dos rivales de un plumazo, cogiendo una importante cantidad de puntos que más tarde, supo administrar hasta hacerse con uno de los pasaportes a la Gran Final. 

Este zaragozano de 56 años, que ha venido acompañado por su hija Eva y a quien ha tenido a pie de rail en todo momento, ya se llevó una alegría al llevarse por delante a Leo Margets y ganar así la sudadera que tenía en su cabeza, pero nada comparable con la satisfacción de ganar su pasaporte para participar en su primer torneo de 500 € de buy-in: "Juego normalmente torneos de 1 € y 2 €. A veces, muy de vez en cuando, juego alguno de 5 €, pero soy consciente que hay más nivel que en los que juego normalmente. Participé en la etapa de Zaragoza, pero ahí no salió nada, duré poco. Aquí sin embargo, lo he pasado muy bien, aunque estaba un poco tenso al principio, pero al final, ha salido todo a pedir de boca. Una experiencia muy buena", nos decía Miguel Ángel justo después de acabar el torneo.

Por el camino, mención especial, merece la figura de Marcos, este sevillano que junto a su pareja Cristina, ha participado en todas las etapas del circuito a excepción de la de A Coruña. Aquí, en Bilbao, se ha metido en mesa final, y por un momento soñó con lograr el objetivo del pasaporte a la Gran Final, pero uno de esos flips que te dan o te quitan, truncó sus posibilidades. Con QQ acabó con todo en el centro contra el AK de Darwin, quien conectaba un K en el turn para dejar muy corto a Marcos, cayendo eliminado inmediatamente después en 6ª posición. 

Precisamente Darwin, después de muchas idas y venidas, y de salvar el pescuezo en varias ocasiones, acabó siendo el jugador que caía eliminado en 4ª posición, es decir, a las puertas del pasaporte a la Gran Final. Esta vez, el flip no salió a su favor. Darwin se restaba con 77 desde el botón encontrando a Miguel Ángel en ciega grande con AJ dispuesto a pagarle y acabar ahí el torneo. Así fue. El flop no cambió nada, pero sí el A del turn que ponía punto y final al torneo con los tres clasificados para la Gran Final: el citado Miguel Ángel, Ilargi y Pablo.

Pablo, de 38 años, llegaba aquí desde Vitoria, haciendo filigranas para organizar su agenda: "He venido porque he encontrado la forma de cuadrarlo con la familia. Tengo un hijo, y otro en camino. No es fácil organizarse y sacar un rato para estas cosas. Es mi segunda vez jugando en vivo. La primera fue en Santander el año pasado, pero nada que ver con hoy. Lo he pasado súper bien... Bomba podría decirse, y además me voy con el pase a la Gran Final. Estoy contentísimo. Ahora a Madrid, a vivir otra experiencia, ese es el objetivo. Disfrutar". Estas eran las declaraciones de un vitoriano lleno de alegría y felicidad, que no dejaba el teléfono para contar a los suyos que el objetivo estaba cumplido.

A quien no le hizo falta comunicarse por teléfono con los suyos, fue a Ilargi. Él llegó de Lekeitio acompañado por 7 amigos, todos ellos también clasificados para este WiPT Bilbao. En ningún momento dejó de sentir el apoyo de su rail, que al grito de "Vamos Bela", aplaudían todos y cada uno de los botes que este jugador de 24 años ganaba (y no fueron pocos): "Es la primera vez que juego en vivo, la primera. Ha sido una experiencia muy bonita, aunque estaba muy nervioso al principio, pero gracias al apoyo de mis amigos, sin los cuales no hubiera venido, las cosas han salido tan bien como han salido. Mejor estreno imposible. Ahora a Madrid, a vivir otra experiencia, y seguro que también iré acompañado". 

El Winamax Poker Tour de Bilbao pone de esta forma su punto y final. El circuito ahora se toma un respiro hasta mediados del próximo mes de enero, cuando recalará en la útlima etapa de la temporada antes de la Gran Final. Será en Castellón, en una nueva etapa de dos días de duración. ¡Allí nos vemos!