El flamante Top Shark tiene buenas sensaciones en el torneo más caro del festival
Sus compañeros Adrián Mateos y François Pirault también siguen en la pelea
El segundo torneo más importante de la jornada es el High Roller, cuyo buy-in lo hace extremadamente exclusivo. Basta con echar un ojo a los tapetes para caer en la cuenta de que los relojes Casio no abundan. Lo mínimo que se despacha es el Rolex Oyster Perpetual, cuyo precio ronda los 5.000 €. También hemos visto un Hublot, un Panerai, un TAG Heuer y un Bulgari.
Vamos, que no es torneo para tiesos. Entre los jugadores que siguen en liza (43 de los 303 iniciales) se encuentra el flamante Top Shark español Álex Romero, cuya pila de fichas naranja le delata.
"Casi me he doblado en dos manos", comenta el andaluz, que sigue todavía saboreando su mesa final en el pasado
EPT de Montecarlo.
En esta ocasión no está acompañado de su chica. Se ha escapado para ver una actuación del Mago Pop. Ser pareja de un jugador profesional de póker es muy sacrificado. Las espera, los viajes, los horarios, la dificultad para planificar... Además, Torrelodones no es Praga en cuanto a patrimonio (es el propio Romero quien lo dice). Por suerte para ella, el Winamax Poker Open ofrece otras actividades lúdico-festivas con las que echar el rato. Pero volvamos a And1ero, que tiene entre ceja y ceja los 60.000 € reservados para el ganador. Al igual que sus compañeros Adrián Mateos y François Pirault. Seguiremos informando...
Adrián Mateos se lo piensa antes de hablar.
François Pirault sonríe a la cámara de Gema.