[Blog] WSOP 2042: mi reportaje
Por General
dentroComo todos los años desde hace más de 70, los gamblers esperan con impaciencia el inicio de las World Series of Poker para ir en la búsqueda del ansiado brazalete y, por supuesto, de la saca de billetes.
Esta edición de 2042 de las Series Mundiales será especialmente seguida por el público francófono, sobre todo después de la victoria de Adrián Mateos en el Main Event el año anterior. El madrileño, a quien le siguen llamando La máquina, protagonizó otro verano de antología tras firmar un nuevo doblete gracias a su victoria en el Big One y en el Super Senior Event, privando al incombustible Doyle Brunson, de 109 años, de un 28º brazalete que le hubiera permitido igualar el récord de Phil Hellmuth.
Pero si esta nueva entrega bajo los asfixiantes 50°C de Nevada ha vuelto a atraer a miles de apasionados del naipe llegados de todos los rincones del planeta, si Movistar Plus ha vuelto a poner un enorme cheque sobre la mesa para obtener los derechos audiovisuales con objeto de hacer soñar a miles de espectadores durante todo el mes de julio, es sobre todo porque el futuro del póker mundial debutará en estas Series Mundiales 2042: Kylian Sanchis, con 21 primaveras recién cumplidas, pisará por primera vez la moqueta del casino Río de Las Vegas. Kiki no ha venido de turismo a admirar las fuentes del Bellagio o a regar por aquí y por allá, aunque la tentación está en todas partes, especialmente a esa edad…
El joven franco-español, que lleva jugando en las mesas de Winamax desde los 18 años bajo el apodo de "Sanchis7", impresiona por su soltura en los tapetes. "Mi padre me decía cuando era más joven que Zinedine Zidane no corría en un campo de fútbol, su talento le permitía volar sobre el terreno de juego y zafarse de los adversarios. Cuando llego a una mesa es precisamente esa sensación de superioridad la que busco para desmoralizar a los villanos”, comenta.
Sucesor del famoso Louis Linard en la Top Shark Academy (el francés ganó por fin en 2038 a la edad de 48 años), Kilian esperaba un camino algo menos accidentado que el de su predecesor. "Labrik... ¡O más bien LaVieilleBrik, como suelo llamarlo! Siempre me ha dicho que hay que creer en los sueños. Tuvo que jugar 12 finales de Top Shark antes de ganar una. Pero finalmente lo hizo. Supongo que tenía razón, después de todo”.
Tras un primer trofeo durante su año como Top Shark (ocurrió en el WPO de Bucarest tras vencer al regular Sergio Aído, todavía en forma a pesar de los años), Winamax decide mantener a Kilian una temporada más. El prodigio respondería con la primera plaza del Evento Principal del EPT de Amneville: había nacido un Pro. Por aquel entonces, el EPT de Amnéville era mucho más popular y prestigioso que el EPT de Barcelona. Los 2,4 millones de euros de premio daban fe de ello.
“En Amneville me encontré con Kool Shen durante un descanso para cenar. Estaba haciendo flexiones con una mano en el asfalto del aparcamiento del casino. Seguía en un estado de forma impresionante para su edad. Recuerdo que me confesó que debía machacarse para el lanzamiento de su single Ojo con el COVID si no quieres problemas. Allí Bruno me presentó oficialmente a Stéphane Matheu. El antiguo entrenador del Team Winamax estaba ya retirado, pero continuaba siendo una figura emblemática en el póker. Fue él quien fichó a Gaëlle Baumann 30 años antes: ¡desde entonces ha ganado un título del EPT, un título del WPT y cuatro brazaletes de las WSOP! Cuando conocí a Stéph entendí por qué todos los viejos rockeros, los Aladins, los VietF0us, los On_The_Roads, se habían convertido en leyendas del juego. Comprendí que él era la clave”, confiesa.
Pero volvamos a Las Vegas y a las primeras WSOP de Kylian Sanchis. Para su estreno, el joven decidió ponerse la camiseta del Brentford. En homenaje, por supuesto, a otro Kilian (Mbappé) que la llevó en su último partido en activo: la final de la Liga de Campeones de 2038. La camiseta es un regalo de Romain Lewis. El otrora W roja tomó las riendas del club en 2032, justo después de superar los 40 millones de dólares en ganancias en vivo. "También me la pongo en casa cuando grindo. ¡Es como si sintiera el espíritu de R. Lewis! Toda su fuerza, toda su paciencia, su inteligencia del juego... En resumen, este maillot me aporta mucho. De entrada, soy uno de los grandes favoritos del verano y, con la estrella de la suerte del Brenford, ¡me siento invencible!”.
Durante el primer mes de competición la nueva estrella hace saltar la banca, ganando un brazalete en la primera semana, y luego un segundo diez días después, tras un histórico heads-up contra el hijo de Sonny Franco. Es oficial: las habilidades con las cartas son hereditarias, pero eso ya lo sabíamos gracias a Doyle y Todd Brunson. Sin embargo, lo mejor está por llegar. Después de seis semanas de torneos, Kylian sigue en una nube: va líder del Main Event por octavo día consecutivo. La mesa final está más cerca.
Un momento con el que siempre soñó. Desde su nacimiento en junio de 2021, Kylian ha mamado póker, tocando sus primeras cartas cuando aún no caminaba. Empezó a fantasear con las WSOP viendo los streamings con sus padres verano tras verano, incluida la edición de 2030, en la que su progenitor se quedó a un paso del título tras perder heads-up final contra Daniel Negreanu, que cimentó aún más su estatus de leyenda del naipe.
Doce años después, por fin le llega el turno a Kylian. Toda la comunidad francófona se ha reunido en las gradas de la Sala Amazon para apoyarle en este 14 de julio de 2042. Como siempre, los tricolores son los que mejor saben caldear el ambiente. Incluso los brasileños, conocidos por sus buenos pulmones, tuvieron dificultades para competir con los cánticos iniciados por Romain Lewis y replicados por todo el contingente francés.
Desgraciadamente, a pesar de un comienzo muy prometedor, Kylian cae ante un rival más fuerte a falta de tres jugadores. El bote decisivo llega tras cuatro horas sin eliminaciones en este "duelo a tres bandas", en el que cada jugador desplegó su mejor repertorio. Kylian sube en el botón, el brasileño chip-leader opta por una 3-bet desde la ciega pequeña y el egipcio amateur va 4-bet all-in desde la ciega grande. Tras un rato de reflexión, Kylian se apunta a la fiesta: all-in. Todo el clan francés se levanta. La tensión está en su punto álgido. El brasileño empuja su plástico y muestra sus dos ases rojos. Decepcionado, Kylian entrega dos reinas. Con su As-4, el egipcio está en teoría kaput también.
El clan brasileño enloquece: ¡su compatriota está a un board del título! Los franceses piden con todas sus fuerzas una de las dos reinas del paquete. Kylian se acerca al rail coger ánimos. Sus padres están allí con las manos sobre los hombros del vástago y los ojos clavados en el crupier. Una por una, las cartas se voltean. 9 de diamantes... 6 de corazones... ¡Reina de picas! Los gritos de alegría del clan francés sacuden la Sala Amazon, tapando los lamentos de los aficionados brasileños. Sólo Kylian se mantiene impasible: acaba de pasar a ultrafavorito, pero aún le quedan dos cartas por pasar antes de poder celebrar nada.
Una vez más el crupier da un golpecito en la mesa. El turn: un rey de picas. Interesante. El egipcio está jugando ahora por un proyecto de color. Las caras se congelan detrás de Kylian: ¡no les gusta este giro! Pero el egipcio está corto de fichas, por lo que Kylian no puede ser eliminado por él. Y si gana esta mano, tendrá el 99 % de las fichas. En otras palabras: nueve de sus diez dedos estarán en el trofeo de Campeón del Mundo.
“River, please”, ordena por micrófono el director del torneo. La sala entera aguanta la respiración.
“And the riiiiiiiver is…”.
“The Ace of clubs!”.
Y Kylian dice adiós al brazalete. El chip-leader brasileño liga y gana. El Evento Principal termina sin llegar al heads-up definitivo. Los brasileños están encantados; el clan francés está aturdido, en silencio. Pero el runner-up mantiene la cabeza alta y sonríe. Estrecha la mano de sus adversarios, felicita al nuevo Campeón del Mundo y vuelve con su familia, arrojándose a los brazos de sus padres. "Todavía no he conseguido hacerlo mejor que tú", le dice a su padre. "¡Todavía no, todavía no! Pero llegará...", le respondo tratando de contener las lágrimas. "Estoy orgulloso de ti, hijo mío”.
FIN
P.D.: Sí, efectivamente, ¡Miriam está embarazada! Esperamos la llegada de nuestro primer hijo con infinita alegría e impaciencia para finales de mayo o principios de junio. Sin embargo, como manda la tradición, no desvelaremos todavía su verdadero nombre... ¡Seguro que a muchos le sorprende! ¡Nos vemos en las mesas!