Unos días después del lanzamiento del Winamax Poker Tour en el popular barrio francés de La Villette, los españoles también tuvieron la oportunidad de competir en las mesas del WiPT, en una primera etapa en la que estoy orgulloso y feliz de haber participado. 900 jugadores es ciertamente menos impresionante que los 2.500 reunidos en París, pero el ambiente y la acogida de todos estos aficionados ibéricos fue tan reconfortante como en Francia. La etapa inaugural de Aranjuez, hábilmente dirigida por el jefe de Eventos de la W Roja, Matthieu Duran, no tuvo nada que envidiar a la de la Ciudad de la Luz. 

Por supuesto, los focos se dirigieron principalmente hacia Adrián Mateos, Leo Margets y Alejandro Romero, pero el Team Winamax es, como su nombre indica, un equipo. Al otro lado de los Pirineos, yo soy el "Díaz" francés; asimismo, Pierre y Romain también gozan de popularidad, como Gaëlle, Davidi, Muss', Kool Shen y João, mundialmente famosos. Solo falta que François y Loïc se dejen ver un poco más por aquellos lares... Loïc ya va por buen camino, pues forma parte de los 21 clasificados para la Gran Final. Aunque yo no perdí el tiempo. Hice caso a Calamusa y tan pronto como fui eliminado del Evento Principal, me eché a los brazos de nuestros particulares Sit&Go. 

¿Te perdiste la inauguración del #WiPT ? Te lo resumimos en su correspondiente Aftermovie pic.twitter.com/eszNbqkorE

— Winamax Póker (@Winamax_Espana) November 17, 2022

Efectivamente, no tuve suerte con las cartas durante este fin de semana de locura en la capital de España. Sin embargo, me lo pasé de lujo, sobre todo gracias a la hermosa velada del viernes con el personal de Winamax durante la cual me crucé con muchos pesos pesados de la industria del naipe. Madrid es una ciudad preciosa con muchos rincones mágicos y la azotea del Círculo de Bellas Artes es magnífica. En resumen: todo salió a pedir de boca. Para muestra, esta foto de aquí abajo, que se convertiría en un bonito collage con unos estupendos selfies tomados con Romain y Adri al término del ágape... si no fuera porque perdí mi teléfono en algún punto de éste. C'est la vie !
 

La noche madrileña desde la terraza del Círculo de Bellas Artes.
 

La recta final

Llámame loco, pero algo dentro de mí me dice que esta anécdota es un buen augurio, así que nadie se sorprenda si protagonizo titulares en Praga, que como manda la tradición acogerá el último EPT del año. A pesar de haber participado siete veces en el Evento Principal, sigo en blanco. Los eventos paralelos, no obstante, se me dan mejor: semifinalista en el Eureka High Roller en 2016, finalista en un evento paralelo el pasado mes de marzo y otro más antes del Covid-19. Simplemente, me encanta este destino. Conviene señalar que el nivel es bastante alto, pero sigo sintiéndome bien en este casino, a pesar de todos esos horribles ruidos de sillas que crujen en cuanto un jugador se levanta. Cada sala del torneo tiene su propio encanto. Además, en caso de eliminación prematura, la ciudad ofrece unos de los mercados navideños más monos; pero, sobre todo, siempre es un placer volver a una ciudad en la que viví durante varias temporadas. 
 

El Team Winamax al completo.

Después, tocará recargar pilas con la familia. El pequeño Noah vivirá su segunda Navidad. Dos paradas de WiPT están en mi calendario para empezar el 2023: Montpellier y Lyon. Por supuesto, hay otro lugar que espero con ansias en enero, y es... ¡mi hogar! Tengo el set-up perfectamente preparado para jugar las Winamax Series invernales. Estoy deseando empezar a clicar y añadir unas cuantas botellas de champán a mi colección. ¡No me dejan adelantar mucho, pero por lo visto la bolsa de premios hará mucho ruido! Nos vemos pronto en las mesas.

¡Abrazos!

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