[Blog] ¡Puesta a punto!

Por dentro

[Blog] ¡Puesta a punto!

Para ganar dinero en el póker es capital controlar las emociones. Así de simple. Nada de PioSolver ni programas ni historias técnicas complicadas. Esto ayuda para ir más o menos rápido, pero ganar a largo plazo es cosa de controlar la cabeza, de no caer en la ira, en la frustración, de no romper mil teclados ni apostarlo todo a una para recuperarse. Es fácil, para vencer en el póker hay que ser disciplinado.  Entonces, ¿cómo es que no todo el mundo lo logra? Bueno, no es sencillo.

¿A quién no le ha pasado tener uno de esos días en los que no hay manera de estar centrado en las mesas?  Días en los que se suceden todo tipo de pensamientos. “Mierda, ¿por qué habré hecho esto?” “¿Cómo voy a recuperar el dinero?” “Venga, voy a probar suerte, hoy es el día”. Y al caer en bucle, pierdes, te cabreas y la ansiedad se apodera de ti. Toca recuperarlo. Toca quedarse pegado a la pantalla hasta las mil. Pero te sientes mal porque en el fondo sabías que estabas irascible, ansioso o con muy poca paciencia. Jugar en semejantes condiciones solo potencia y saca todas esas emociones a la luz. Y es que todo lo que nos pasa fuera de las mesas nos afecta en las mesas.

B.G.Lo que hoy vengo a decirte es que sea por lo que sea que estés pasando (ansiedad, estrés, depresión...), no estás solo. Estas últimas semanas he estado pasando por una racha dura mentalmente, de bastante ansiedad y hoy quiero contar lo que he averiguado al respecto y cómo le voy a dar la vuelta a la tortilla y a coger la sartén por el mango. Tú puedes hacer lo mismo. Pienso que te puede servir en todos los ámbitos. Si eres como yo, igual has intentado ser fuerte durante demasiado tiempo. Igual has querido hacerlo todo bien… hasta que petas. 

Después de un 2020 intenso y llevando muchas cosas para adelante, este último mes ha podido conmigo. Por distintas razones, he estado casi dos meses con las maletas hechas de un lado para otro. No sabía dónde iba a vivir y no tener esto claro me estaba restando tranquilidad, orden y mucha rutina en mi vida. Y claro, empiezas a tener tensión en el pecho, a no respirar del todo bien, a comer mal, horarios descolocados... En fin, una ansiedad de caballo, vamos.

En mi caso, sentir que tengo que tener mi vida ordenada, saber dónde voy a vivir, mis finanzas, mi operativa, mis riesgos... todo bajo control al milímetro. ¡Vamos, una bonita ilusión bastante irreal! Pero ya es hora de poner el freno. De mirar todos estos pensamientos desde fuera como si no fueran de uno mismo y de establecer ciertas pautas como si se las estuvieras dando a un amigo que no eres tú. Hora de autohackearnos. Esto es lo que yo he hecho conmigo mismo. Me he observado y analizado. He aceptado la nueva situación y averiguado sobre ello y, lo más importante, me he sentado conmigo mismo para buscar mis nuevas reglas del juego.

Después del café de por la mañana: 5 minutos de lectura.
Después del almuerzo: 20 minutos de paseo con un audiolibro.
Por cada vez que medite: 40 € para comprar un nuevo ordenador.
Por cada vez que haga deporte: 20 € para una viaje en familia. 

Papel y lápiz 

Borja WiPT

Comparto 3 pautas a las que he llegado como conclusión y que de alguna manera voy a aplicar. Quizás te sirvan:

1. Sí, parece claro que el dominio de la atención es clave para salir del bucle. No he venido a hablarte de que hay que hacer mindfulness porque a día de hoy yo no lo hago, aunque sé que sería a lo que habría que aspirar, debería intentar empezar y estoy en proceso. Pero algo intermedio y aplicable para cuando estás jodido y quieres empezar con algo como es mi caso es hacer algo que te guste mucho y que requiera toda tu atención. Un partido de fútbol con los colegas, una hora de alguna clase dirigida de actividad física, lavar los platos o incluso sentarte frente al mar mirando al horizonte. Cualquier cosa que requiera tu atención, te mantenga muy presente y te saque de tu mente. Estirar o pasear por ejemplo son buenos comienzos y, además, dicen, ayuda a respirar mejor (a mí me cuestan más que una clase de crossfit, no te voy a engañar, pero bueno, tendré que incorporar algo tan sencillo). Cualquier actividad física al final calma la mente. Como siempre, el deporte es una buena solución para todo.

2. Parece claro también que el tema está dentro, que debemos cuidar nuestra mente y nuestros pensamientos. Entonces, además de cuidar cómo nos hablamos a nosotros mismos, es importante tener cuidado con las ideas que dejamos que nos influyan. Un poco de detox de noticias no viene nada mal, incluido el móvil y las redes sociales. Apaga el teléfono y desconecta. El aparatito te está provocando más ansiedad, y lo sabes. Como sé que no lo vas a hacer, una cosa que sí puedes hacer es ponerte horarios para el móvil. Horarios establecidos. De 9:00 h a 10:00 h. De 15:00 h a 16:00 h y de 21:00 h a 23:00 h, por ejemplo. No más. Podríamos incluir que es buen método el leer a autores que te inspiren. Si te cuesta leer porque tu atención está dispersa, ponte un audiolibro o algo en YouTube inspirador, que siempre es más fácil para empezar.

3. Y sí: toda mala racha de ansiedad, estrés o depresión, sea lo que sea que estés pasando, se soluciona con algo de rutina, hábitos y disciplina. Vale, pero ¿cómo? Establece pequeños hábitos junto a algo que ya hagas en tu día a día. Yo ahora mismo he cambiado tanto de rutina que he perdido todos mis hábitos, así que tendré que empezar de nuevo.

Mente sana 

B.G.
Y es importante que sepas que, si quieres cambiar tus acciones, lo más efectivo es cambiar la visión que tengas de ti mismo, tu identidad. Piensa qué tipo de persona quieres ser. Si la persona que quieres ser es deportista no hace falta que empieces yendo al gimnasio una hora todos los días porque no lo vas a hacer, pero preséntate en la sala o en el parque, aunque solo sea dos minutos. Conviértete en el tipo de persona que no falta a sus entrenamientos. O si quieres ser el mejor jugador de póker del mundo, pero has perdido tus hábitos, abre el programa de estudio, aunque no hagas mucho. Esas miniacciones cada día, esos minihábitos son buena manera de empezar convenciendo a tu cerebro de que eres esa clase de persona.

No te castigues mentalmente si no estás donde quieres estar. Cuando pienses que estás lejos de donde quieres estar, piensa que a mí no me gusta andar demasiado y que en seis meses me voy a hacer una carrera Ironman. ¡Semana a semana! Intenta fluir, tener ese equilibrio entre lo que ya es automático para ti y lo que cuesta mucho porque aún no lo has conquistado. Rétate y supérate allá donde estés. Ten paciencia y a por tu control mental y de tus emociones. Ese es el camino.

Te dejo, por último, con la idea de que te tomes esto de la ansiedad no como un obstáculo en tu vida y síntoma de tu mala suerte, sino al revés, como un momento perfecto y obligatorio que la vida te ha puesto para frenar, replantearte cosas y fortalecerte en esta etapa de transición hacia una mejor versión de ti mismo. Así la enfoco yo, no huyo de ella; la enfrento y la trabajo para salir cada vez más fuerte. De hecho, me apetece mucho esta nueva etapa.

Mis próximos meses van a consistir en poner todo esto en práctica. Mi puesta a punto va a estar enfocada en tres grandes pivotes: mucho deporte, lectura y tiempo en la naturaleza. ¡Suena increíble! Te deseo lo mismo.


Timotyy

El trotamundos malagueño ha ganado la primera edición de la Top Shark Academy organizada en España.

Suivez Timotyy sur FacebookSuivez Timotyy sur TwitterSuivez Timotyy sur Instagram