[Blog] Naipe en vena
Por LIFE STYLE
dentro—¿Cuál es el secreto de la regularidad?
Hace unos días un viejo amigo –dentro y fuera de las mesas- me hizo esta pregunta.
—Solo hay que intentar hacer algo nuevo cada día. Y los resultados acaban llegando —contesté.
¡Vaya respuesta más estúpida! Olvidé que habían pasado diez años desde mis días de jugador amateur. Respondí desde la óptica de un jugador de élite. Dije lo que Steph me comentó sobre Nadal. No, no era esa la respuesta adecuada, así que decidí retrasar un poco la entrega del blog y tomarme un tiempo para reflexionar sobre mis comienzos, es decir, allá por 2008, cuando tenía unos 19 años.
Ningún jugador profesional empezó en este mundillo sabiendo en lo que se metía. Tampoco ganando. Pero apuesto a que no fue por falta de pasión. Cuando rememoro esas primeras jornadas… ¡Oh! La sensación de hacer faroles de 3 ciegas; la adrenalina de cada all-in preflop; las horas que me tiré viendo las partidas de High Stakes que se jugaban en Full Tilt. ¡Sobre todo aquellas en las que estaba Phil Ivey! La pasión por el juego. Pura pasión por el juego.
Más tarde empecé a salir con algunos chavales de mi isla que ya contaban con ganancias en el naipe. ¡Oh, la emoción de ver los primeros tutoriales! Siguiendo sus torneos. Cada victoria en el 3,3 $ 180-max. era como ganar un brazalete. La sesiones de 24 h. Los sábados por la noche, sobre las tres de la mañana, empezaba a ‘refrescar’ PokerTube para ver si habían sacado un nuevo episodio de la emisión High Stakes Poker. ¡No se me ocurría irme a la cama antes de verlo en línea! Y los lunes, bueno, los lunes eran sagrados. Tocaba ir al bar, acompañar a mis colegas en sus grinds de SNG de 18 jugadores y comentar manos. ¿Quién se acuerda del 5-bet shove de Ivey con 52o frente a Lex? ¿Y del 8-way bluff en T22 de Dwan contra los ases de Greenstein? ¡De esta manera aprendí qué eran los blockers! Sí, el grinding estilo tasca era lo común. No había yoga, ni meditación, ni la dieta Keto. Solo se jugaba. Junio y julio eran sinónimos de las World Series of Poker. De hecho, era un lector más que habitual de PokerNews. Estudiaba cada detalle: los protagonistas, sus hazañas, el estilo de juego… Railing-dreaming, podríamos decir. Pronto. Muy pronto, me repetía.
¡Parece mentira! ¡Ha pasado tanto tiempo! Ahora soy yo el protagonista de los rails, el estudiado, el seguido. He tachado cada punto de mi lista de deseos. He recorrido el mundo. Y he tenido muchas ocasiones para perderme. Pero sigo aquí dándolo todo. Marcándome objetivos. Intentando llevar mi juego a un nivel más alto. Y así sucesivamente.
Con respecto al pregunta de mi colega supongo que guarda relación con el hecho de conservar la llama del debutante. Sigo aprendiendo cada día, ya que, como diría Greenstein: “No eres un verdadero jugador de póker si solo juegas NLHE”.
Todavía quedo en el bar con mis amigos de toda la vida para echar unas cervezas y comentar manos. En Las Vegas me encanta compartir momentos en la piscina bebiendo, fumando y charlando sobre naipe. Mano tras mano. Me siguen dando las seis de la mañana charlando con Adrián y conspirando para “destrozar a esos tíos”. Lo único que ha cambiado es el nivel de la conversación, así que no, no creo que el éxito sea el secreto de la regularidad, sino la pasión y el amor por el juego. Y en ese sentido nadie me supera.