[Blog] El juego es el espejo del espíritu
Por LIFE STYLE
dentro¡Bienvenidos a una nueva entrada de mi blog! Hoy quería hablaros de la correlación entre las funciones cognitivas y la capacidad de jugar al máximo nivel posible.
Nuestras decisiones estás condicionadas por numerosos factores. El estrés, por ejemplo, impide el análisis óptimo de una situación y la información que se puede extraer. Normalmente, ¡es mejor no jugar después de haber discutido con nuestra pareja!
El póker es un juego que requiere un conocimiento profundo de nosotros mismos para alcanzar el éxito. Los mejores jugadores saben que es importante presentarse a las grandes citas en plena forma y, sobre todo, completamente centrado en el objetivo. Por esta razón, muchos jugadores practican el yoga u otras técnicas de meditación para sentirse relajado y con el "espíritu libre” en la mesa.
Mens sana in corpore sano
Son muchos los componentes externos que alteran nuestras funciones cognitivas. Ser consciente de tu estado de forma es una cualidad que considero fundamental para un pro. Más de una vez he decidido no participar en un torneo o no empezar una sesión online porque sabía que no estaba en las mejores condiciones para jugar. En este caso, lo primero que hay que hacer es pensar en frío, analizar la situación, identificar los elementos controlables y ponerlos a tu disposición.Incluso la ciencia se ha interesado por las funciones cognitivas aplicadas en el póker. De hecho, he leído que un grupo de investigadores ha sacado un cuestionario que ayuda a los jugadores a saber si están en condiciones óptimas para sentarse en la mesa. En general, aconsejo a los jóvenes jugadores no jugar cuando haya dudas sobre el rendimiento. Hay torneos a todas horas y perderse alguno no significa comprometer un run. Si no os sentís a tope, ¡es mejor que vayáis a comeros una pizza y os relajéis un poco!
Los preparadores físicos también han comprendido la importancia de añadir el entrenamiento corporal al mental. No obstante, en nuestro mundo no tenemos a todo un equipo de expertos a nuestra disposición, así que hay que arreglárselas: debemos convertirnos en psicólogos de nosotros mismos, ser nuestros propios preparadores físicos y conocernos mejor que nadie.
Además, en el póker hay que tener muy presente qué recursos manejamos. Antes de intentar comprender cómo actúa el resto de adversarios, debemos analizar cómo y qué nos hace actuar a nosotros de una determinada manera, algo que conlleva tiempo ya que las personas estamos continuamente cambiando. ¡Exactamente como el póker! ¡Nunca hay que dejar de aprender! Sed la mejor versión de vosotros mismos y los resultados en las mesas (y en vuestra vida personal) no tardarán en llegar.
Good luck!
[Nota de la redacción: no te pierdas detalle de cómo le va al bueno de "Muss" en estos momentos en el PSPC de las Bahamas]